El ego en nuestra mente siempre está buscando peligros y amenazas en nuestro entorno, por lo que nos prefiere dentro de nuestra zona de confort. Nuestro verdadero ser en cambio busca nuevas posibilidades y la expansión, para poder llegar a ser la mejor versión de nosotros mismos. Es por eso que la mayor herramienta del ego para controlarnos es el miedo. Mientras que el camino de nuestro verdadero ser es la armonía.