Todos tenemos intuición. No hace falta desarrollarla, solo hace falta aprender a escuchar. La intuición es nuestra mente subconsciente hablándonos de aquello que nuestra mente consciente pasó por alto o no notó. Quién no ha dicho: yo sabía que esto iba a pasar, porqué no me hice caso, algo no me olía bien, me dio mala espina, yo sabía. En el fondo sabemos, pero dudamos de nosotros mismos. Dudamos porque nuestra mente consciente no tiene esa información y el ego lo desecha como algo insignificante. No es importante correr ante todo lo que diga nuestra intuición, pero al menos prestar atención. Nunca la deseches, toma nota mental y verás que tarde o temprano tu intuición estaba en lo correcto. Pero ojo, tu intuición te habla desde la certeza, no desde las emociones. Quien viene cargado de emociones es el ego y nos hace errar nuestro camino.